10 de marzo de 2019

ACTUAR CON ENTENDIMIENTO





ACTUAR CON ENTENDIMIENTO









La Palabra de Dios es tan pura, didáctica y práctica por eso reconocemos que no necesitamos en nuestra vida espiritual de otro libro para nuestra guía. El Apóstol Pablo enseñó:

“Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra”
2 Timoteo 3:16-17 RVR1960

Por eso todas mis enseñanzas las he basado en ella y las relaciono con acontecimientos que me han sucedido pues considero que una instrucción dada desde mi testimonio la hace más entendible y desde luego creíble. He tenido buenos pastores que nunca me invitaron a cruzar la avenida sin ellos antes haberlo hecho o cruzar un rio sin haber nadado en el previamente. Por eso, a pesar de  no ser un cristiano con alas, cometo pecados y errores, tengo un corazón herido, seguiré adelante para llegar a la meta y mientras voy (ID el mandato de Jesucristo) enseñaré. Hay dos versículos que me apoyan y  que  dejo para reflexión:

“Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él (tú y yo) cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite.”
Isaías 1:6 RVR1960


“Y estoy seguro de que Dios, que ha comenzado en ustedes una labor tan excelente, la llevará a feliz término en espera del día de Cristo Jesús”
Filipenses  1:6 BLPH

Hay una historia bíblica narrada a partir de Génesis quince, y nos enseña actuar con entendimiento, tenemos a Abraham con noventa y nueve años sin hijos, esperando ver el cumplimiento de la promesa  a Sara de sanarla pues era estéril  hasta que se cumple  el alumbramiento de Isaac, por eso Dios le dijo: 

“Pero Dios le dijo: —No te angusties por el muchacho ni por tu esclava. Hazle caso a Sara, porque la descendencia que llevará tu nombre será la de Isaac.”
Génesis 21:12 BLPH

Creemos que el tiempo ocurrido entre Génesis quince y el veintiuno son cerca de veinte cinco años, paradójicamente son solo seis capítulos para nosotros. Más adelante nos encontramos la historia de Isaac, este se casó con cuarenta años, pronto descubrió la esterilidad de Rebeca aquella a quién amaba, pero recordó su propia historia y como sus papás clamaron durante muchos años por ver el cumplimiento de su promesa, y tomó cartas en el asunto:


“Isaac tenía cuarenta años cuando se casó con Rebeca, hija de Betuel, arameo de Parán Aram, y hermana de Labán, también arameo.”
Génesis 25:20 BLPH

“Isaac suplicó al Señor por su mujer, porque era estéril. El Señor oyó su oración y ella quedó embarazada”
Génesis 25:21 BLPH

Más vale tarde que nunca, dice el refrán y el tiempo que le tardó la promesa a Isaac fue de viente nueve años, pero no se le ocurrió a este hacer trampas ni ayudarle a Dios, sino que se sostuvo en la promesa y clamor; también en su amor por Rebeca esperando que Dios les diera un hijo.

“Detrás salió su hermano, agarrado con una mano al talón de Esaú. A este lo llamaron Jacob. Cuando nacieron, Isaac tenía sesenta años.”
Génesis 25:26 BLPH

Una vez más, para abrir nuestro entendimiento y actuar correctamente, entre los versículos veinte y veintiséis han pasado veinte años, y por fin se cumplió la promesa de la sanidad de Rebeca.

Tratando de hacer una correcta memoria, sobre los doce años entregué mi corazón a Jesucristo como lo he dicho en otros estudios y comencé mi andadura en la Fe cristiana, a los dieciséis tuve un llamamiento público, pero con treinta años aproximadamente entendí que era tener una relación personal, intima con Dios y conscientemente apliqué este concepto a mi vida. Más adelante a pesar de recibir varias enseñanzas acerca de la necesidad del cambiar mi mente natural a la mente de Cristo, por fin lo entendí y tomé este nuevo estilo de pensar y actuar. Para este momento ya han pasado treinta años, pero son ocho líneas de escritura, procurando resumir mi historia. 

Por eso recalco siempre que puedo dos frases, la primera “Cambiar nuestra mentalidad natural por la Mente de Cristo” y la segunda es muy ambigua, “Entendimiento Apostólico”. Actuar con entendimiento es alinear el Cielo con la tierra, es traer el Reino de  Dios a nuestras vidas pero en forma tácita pero tangible siendo un testimonio vivo de Jesucristo en nosotros.

En estos días tuve la oportunidad de hablar con un gran amigo y hermano, una persona con una relación tan estrecha con Dios, pues manifiesta un don de Ciencia tremendo, bíblicamente “Un vidente”, hablábamos acerca de la muerte de un gran mentor para él que ha partido a la Presencia de Dios, pero este gran siervo como mi amigo dice “Caminaba con Dios”, y aunque no le conocí,  por los testimonios dados, este hombre en vida supo actuar con entendimiento para acercar el Reino de Dios con tal facilidad que en mí entender este hombre logró tener realmente este cambio de mentalidad natural por la Mente de Cristo actuando con entendimiento apostólico, quizás como lo hicieron los primeros, únicos y verdaderos Apóstoles. 

No permitas que  te pasen treinta años de vida errática, creyendo que estás actuando correctamente, acércate delante de  Dios con un corazón humilde y humillado reconociendo que aún hay muchas heridas en ti pero que estas convencido que Dios mismo terminará su obra en ti.

Si te gusto este escrito y quieres leerlo completo, entra en mí blogs, compártelo y suscríbete:


ACTUAR CON ENTENDIMIENTO


@agopla1976 Instagram
@Alfonso23755010 Twitter
Facebook: Inspiraciones Diarias de Alfonso Gomez-Plaza
Tel 07446 424456


Dios te bendiga y traiga revelación a tu vida de la Mentalidad de Cristo que ya está en ti



  
  


No hay comentarios:

Publicar un comentario