14 de noviembre de 2019

¡MÍ NUEVO CARÁCTER: TRANSMITIENDO LA FE!

¡MÍ NUEVO CARÁCTER: TRASMITIENDO LA FE!




El miedo a perder mí posición, me convierte en un egoísta.











Realmente no estamos acostumbrados a las monarquías. Actualmente, incluso muchos países desean eliminar esta institución por lo que representan o más bien por lo mal que ha representado el poder y la autoridad. En España por ejemplo, todos los partidos de Izquierdas y Republicanos, siempre presentan como plan político central, erradicar la monarquía de los Borbones. Pero este no es el tema a tratar, pero utilizaré esta imagen para enseñar. Se espera que un rey este casado para poder ejercer la monarquía y así garantizar la sucesión dentro de su propia casa y estirpe. Los reyes buscarán estar embarazados lo más pronto posible, porque este nuevo integrante de la familia, será el príncipe o princesa, quién a su vez será, el futuro rey por sucesión directa. Entonces, a partir de su nacimiento, esta criatura comenzará una carrera maratónica de aprender todo lo necesario para ejercer como rey. Toda su enseñanza y educación, gira alrededor de este hecho. Nada se sale de este protocolo, porque se espera que el futuro rey, de la talla, sin importar la edad. La reina Victoria de Inglaterra, comenzó a ejercer como soberana a los 18 años, y nada le impidió ser una de las ilustres monarcas y  emperatriz de los últimos siglos. Todo porque siempre le enseñaron, que algún día sería reina y que debería gobernar.





Cuando hacemos un estudio minucioso de la palabra de nuestro Dios, veremos que esta transmisión también se hizo. Es por ello, que vemos la educación que dio Abraham a Isaac, fue bastante cercana, por ejemplo leemos que cuando a Isaac se le presenta a Rebeca, él la llevó a la tienda de su mamá y allí consoló su alma por la muerte de Sara, al traerla y sellar el matrimonio en dicha tienda (Génesis 24). Si leemos bien la historia de Moisés veremos esa transmisión tan estrecha que tuvo sobre su pupilo Josué (Éxodo 33). Otro claro ejemplo de ello, es Elías y Elíseo. Desde un principio Dios, colocó en el corazón de Elías darle la sucesión a Elíseo, por eso lo preparó para dicho menester. Cuando Elías fue llevado al Cielo, Elíseo estaba a su lado y observó este duro momento. Pero todo lo que era Elías, pasó ahora a Elíseo (2 de Reyes 2). Me quedo corto por enseñar, con ejemplo de Jesucristo con cada uno de sus discípulos, que fueron más de 500, pero la transmisión más férrea y radical, fue con aquellos 12, a pesar que Judas le traicionaría. Para ello deberás leer detenidamente los 4 evangelios. Por último, si estudiamos a Pablo, encontraremos que él comprendía perfectamente lo que significa el legado, la estela, mejor dicho, la importancia de trasmitir la fe, a todo aquel que sea moldeable y asuma su paternidad y que así, estos valores no se pierdan.

“Y lo que has oído de mí en la presencia de muchos testigos, eso encarga a hombres fieles que sean capaces de enseñar también a otros.”
2 Timoteo 2:2 NBL


En muchas ocasiones, nos encontraremos con una dificultad, pues  aquel que tiene que transmitir, que no desea hacerlo por el miedo a perder su posición o liderazgo, delante de aquel a quien él enseñó. Personalmente lo he vivido y es realmente frustrante ver esto. Luego, años más adelante,  encontrarás a tu antiguo mentor con un discípulo, transmitiendo sus enseñanzas, pero tú, te quedaste con las ascuas de no haber sido educado, por aquel, a quién tú esperabas.  El apóstol Pablo, lo hizo con Timoteo, pero a la vez, esperaba que este lo hiciera con otros. Porque el legado debe de seguir, se tiene que hacer de generación a generación. 






Soy de los que considera que el lenguaje se tiene que actualizar, pero los principios y valores, siempre serán los mismos. También tiene que ver mucho la cultura, así que este es un gran factor a tener muy en cuenta. 

El discipulado, por así decirlo, es la cadena que nos garantizará la formación de nuevos líderes, dispuestos en muchos de los casos, a cumplir esas metas  a las cuales nosotros no llegamos. Pero tenemos que dar la oportunidad a las nuevas generaciones su parte. Por eso debemos continuar con esta estrategia multiplicadora con nuestros hijos por ejemplo. Dentro de la congregación tendrás personas que desean tener esa fe que tienes. Habrá quienes les gustaría trabajar contigo en tu ministerio y así crecer mutuamente, tanto como Jesucristo te ha hecho crecer y te ha llamado al lugar donde hoy te encuentras.

No lo dudes, transmite a otros, específicamente tu fe. Permite que tu estela guíe a otros, a los pies de Cristo. Y así, se perpetúe todas y la sana enseñanza.    

Aprovecho para agradecer y honrar a todos aquellos que han invertido parte de sus vidas conmigo. Ninguna de sus enseñanzas, ha caído en saco roto…estoy intentando reproducir sus estelas en otros.

A propósito, para  tener la verdad siempre por delante. Bajo mi necesidad de servir a las iglesias, me gustaría contactar personalmente contigo y la comunidad cristiana  que a diario leen este devocional, visitarlos, tomarnos un café y trabajar con Ustedes, seguiré enviando este mensaje para obtener respuesta vuestra. Tienen todos mis contactos en la parte inferior de este mismo.

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En esta enseñanza,  hablaré acerca  de mi identidad como hijo de Dios. Sí quieres otros artículos completos, entra en la web y lee los estudios allí publicados, compártelo y suscríbete:

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Dios te bendiga y traiga revelación a tú vida de la Mente de Cristo que ya está en ti



  

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