2 de febrero de 2019

LAS NOTAS DE MIS PRUEBAS




LAS NOTAS DE MIS PRUEBAS 







Quienes me conocen y estudiaron conmigo, pueden certificar que no fui un modelo de estudiante. Para comenzar, lo cuento a  manera de testimonio de todo lo que Dios ha hecho, el tiempo de Instituto lo comencé perdiendo el año con tan solo seis materias perdidas. Esto significo que me expulsaran de este Colegio. El segundo año, lo aprobé pero por mal comportamiento no me renovaron la matrícula. El tercer año sucedió lo mismo. 

En estos momentos de mi vida, estoy listo para dejarme morir delante de Jesucristo; supuestamente un par de años antes le había entregado mi Vida, pero no le dejaba gobernar ni mis pensamientos ni mis acciones.

Por aquel entonces conocí a un Joven loco por Jesús de apellido Alzate y él se propuso hacer conmigo un discipulado de manera efectiva, me contacto además con una Familia Misionera Canadiense (Mis más alto respecto y gratitud por la Familia Patterson, Marc y Karen donde quiera que estén: “MIL BENDICIONES”).

Marc tuvo conmigo un par de charlas intensas y me enseño las PUERTAS DE LA ACEPTACIÓN para que pudiera sanar tantas heridas que estaban en mí y que causaba tan mal comportamiento.

Lo acepté y me propuse de todo mí corazón demostrar al Dios vivo dentro de mí… No voy a decir que me gané el colegio para Cristo, pero si puedo decir que  donde inicie mi cuarto año, allí  terminé y me gradué del Instituto  y hoy por hoy tengo muy buena amistad (por WhatsApp) con algunos de mis compañeros de Instituto “PROM 93”.

Lo que no había entendido era, cada año que perdí, en realidad era una prueba que reprobé. Ya sea por las malas notas o por mí mal comportamiento.

Pero hasta que decidí que Cristo tomara las riendas de mi vida las cosas no cambiaron, pero lo más triste fue el no saber reconocer que dentro de mí ya estaba el potencial para poder hacerlo.

Esto es lo que nos enseñó Jesucristo:

“Y cuando vengan las pruebas, no permitas que ellas nos aparten de ti, y líbranos del poder del diablo.”
Mateo 6:13 TLA

Dios reconoce que todos vamos a pasar por las pruebas pues es la manera que tiene Dios para tratar con nosotros, con ellas se buscan dos objetivos por así decirlos:

1- Promovernos de Nivel de Fe: al comprender que cada acto De Dios en nosotros, es un proceso educativo para testimonio hacía los otros, ósea mis pruebas son para darle ejemplo a los demás. Esto también lo vemos en los ejemplos pues todos los hechos del pueblo de Dios en el Antiguo Testamento  nos enseñan la manera en la que debemos de actuar en circunstancias similares.

2- El segundo objetivo por así decirlo y aunque te parezca inadecuado es alejarte del Reino De Dios. Dios no desea cristianos de media tinta, no quiere personas de doble sentir, pues para Él son como algo repulsivo,  los que hoy adoran a Dios y mañana echan suerte en la lotería a ver si se la ganan, simplemente por poner un ejemplo.

Veamos lo que dice Dios con respecto:


“Por tanto, como no eres ni frío ni caliente, sino tibio, estoy por vomitarte de mi boca.”
Apocalipsis 3:16 NVI

Por eso uno de los objetivos de las pruebas es que quienes estaremos por la eternidad con Jesucristo nos podamos mantener firmes en la FE y el FUNDAMENTO del amor De Dios.

No existe ninguna prueba que no se pueda superar, pues si estamos pasando por una, es para calificarnos de algo de lo cual ya fuimos capacitados y solo tenemos que presentar, por así decirlo el examen de aprobación tal como lo hacemos en nuestros estudios ya sean escolares o universitarios.


“No os ha sobrevenido ninguna prueba que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser probados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la prueba la salida, para que podáis soportarla.”
1 Corintios 10:13 RVR95

Por último voy a comentar este testimonio, mi madre está sufriendo de terribles dolores vasculares, normales para su edad, pero ella siempre ha sido muy determinada y obstinada en el tema laboral. Nosotros los hijos por todos los medios le hemos dicho la necesidad de tomar descanso por su salud, pero ella insiste. La cuestión es que el Internista le advirtió de la seriedad de la enfermedad y de las medidas que ella debe de tomar y sí desea mejorar lo tiene que cumplir.

Entre conversación y charla con ella yo la desafié con el mayor amor posible que saliera de mí de esta manera:

Ella me dijo que no estaba dispuesta a quedarse quieta pues sabía que perdería todo hasta la movilidad, por lo cual yo le conteste:

¿Mamá, tú me estas diciendo qué eres más sabia que Dios?

¿A caso, Dios no le ha dado al cuerpo humano la capacidad de auto desconectarse en caso necesario para que no sufra? (Esto es lo que sucede cuando una persona entra en coma)

¿Será que Dios que ha permitido que tú estés pasando por esta dura prueba, no te ha de dar la solución a toda ella?

Y estos son los planteamientos que debemos de hacer cada uno de nosotros cuando tenemos que enfrentarnos a las pruebas que Dios nos permite vivir.

Desconozco totalmente tu situación pero déjame orar por ti en estos momentos:

“JESUCRISTO TE RECONOCEMOS COMO EL SEÑOR DE NUESTRAS VIDAS, GRACIAS POR DARNOS LA LIBERTAD POR MEDIO DE TÚ CRUZ REDENTORA, PERMÍTENOS AFRONTAR LAS PRUEBAS CON SABIDURÍA Y CONOCIMIENTO DE LA MISMA MANERA QUE TÚ LAS PASASTE Y APROBASTE MIENTRAS ESTUVISTE AQUÍ EN LA TIERRA PARA MOLDEARNOS LA MANERA CORRECTA DE VIVIRLAS”

Haz esta oración con FE y permite que Dios siga los PROCESOS de transformación de tú vida.

Recuerda que muchos como tú y yo ya han pasado por las mismas PRUEBAS y las han podido superar cogidos de la MANO DE DIOS.

Las pruebas tienen un propósito divino y Dios nos da la capacidad de superarlas por su amor y misericordia.

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Dios te bendiga y traiga revelación a tu vida de la Mentalidad de Cristo que ya está en ti.



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